
La Sociedad Deportiva Lenense Proinastur ha compartido este jueves 1 de mayo un parte médico oficial sobre el estado de tres futbolistas de su primer equipo: Diego García, Guille Vaamonde y Pablo Guti, todos ellos con lesiones de larga duración que les han apartado de la competición en este tramo final de temporada.
Diego García: operado con éxito del tendón de Aquiles
El delantero Diego García, que se lesionó de gravedad durante el encuentro del pasado Jueves Santo ante el San Martín, sufrió una rotura del tendón de Aquiles derecho. El jugador fue intervenido quirúrgicamente el pasado martes y ya se encuentra recuperándose en su domicilio.

Desde el club se ha querido agradecer públicamente la rapidez y eficacia de la Mutualidad de Futbolistas de Asturias, que, pese a tratarse de fechas festivas y complicadas a nivel administrativo, logró agilizar todos los trámites para una pronta intervención, algo crucial en este tipo de lesiones. El periodo estimado de baja oscila entre los 7 y 9 meses, aunque estará condicionado por la evolución del jugador.
Guille Vaamonde: fractura maxilar en fase de consolidación
Por su parte, el defensa Guille Vaamonde continúa su proceso de recuperación tras la fractura con desplazamiento del seno maxilar izquierdo, sufrida el pasado 30 de marzo en el choque ante el Sporting Atlético.
Aunque físicamente presenta ya una imagen prácticamente normal, sin marcas visibles y sin dolor, la prioridad médica sigue siendo proteger el proceso de consolidación ósea, lo que le impide, por ahora, volver a los terrenos de juego.
Pablo Guti: recuperación complicada tras su segunda rotura de ligamento cruzado
Por último, el club ha compartido una emotiva actualización sobre el estado de Pablo Guti, que sufrió su segunda rotura del ligamento cruzado anterior en la rodilla derecha hace cinco meses y medio, durante un partido contra el filial del Real Sporting.
El jugador, que decidió afrontar esta etapa alejado del terreno de juego, sigue muy unido al equipo y no pierde su vinculación con la plantilla. En sus propias palabras: “Estoy descubriendo en este segundo proceso que estoy enganchado a las sensaciones que da la competición y si no puede ser el fútbol, que ahora mismo ni me lo planteo, será a otra cosa”.
Pablo ha reconocido que atraviesa un momento con ciertas complicaciones, esperadas dentro del proceso, pero mantiene el objetivo de recuperar una vida normal y, si su físico se lo permite, no descarta volver al deporte de alguna manera.
Desde el club se transmite un mensaje de apoyo, fuerza y admiración hacia los tres jugadores, que representan el espíritu de lucha y compromiso que define a la entidad verdiblanca.
